En el ámbito laboral, el feedback empleado es una herramienta esencial para el crecimiento y desarrollo profesional de los colaboradores. Más allá de un simple reconocimiento por su trabajo, los empleados anhelan recibir una orientación clara sobre los aspectos que deben mejorar o corregir para optimizar su desempeño y alcanzar su máximo potencial.
La retroalimentación efectiva no se limita únicamente a los directivos; el feedback empleado adecuado debe fluir en todas las direcciones, sin importar el área o nivel jerárquico dentro de la organización. Los líderes sobresalientes se distinguen por su capacidad para guiar a sus equipos, y una de las formas en que lo logran es mediante la implementación constante de sesiones de feedback.
Para aquellos que lideran una empresa, gestionan un proyecto o tienen bajo su responsabilidad a un equipo, dominar las técnicas de retroalimentación se convierte en una habilidad indispensable. A continuación, exploraremos cómo brindar feedback empleado tanto positivo como negativo de manera efectiva, generando un ambiente de motivación que impulse a las personas a superarse día tras día.
La importancia del feedback empleado constructivo para tu equipo
Para que el feedback empleado sea realmente efectivo, debe ser estratégico y constructivo, basándose en metas claras y resultados cuantificables, como el rendimiento y la eficiencia de los trabajadores.
La retroalimentación juega un papel crucial al ayudar a las personas, al equipo y al departamento a mantener un buen ritmo y desempeño, lo que fortalece a tu empresa y la prepara para el crecimiento. A continuación, se presentan algunas razones por las que el feedback empleado constructivo es fundamental:
Impulsa la motivación de los empleados
El feedback empleado es una excelente manera de reconocer y valorar el trabajo de los empleados, destacando su importancia dentro de la organización. Los colaboradores comprenden lo que están haciendo bien, lo que les permite centrarse en sus puntos fuertes y adquirir nuevas competencias.
Mejora el rendimiento
Los colaboradores bien guiados son más eficientes, por lo que el feedback empleado contribuye a mejorar los indicadores de desempeño tanto a nivel individual como de equipo.
Crea un entorno positivo
Un feedback a empleado bien estructurado y comunicado de manera adecuada fortalece la confianza entre líderes y colaboradores, fomentando un entorno de trabajo positivo donde los empleados encuentran mayor satisfacción al comprender cómo su labor individual impacta en el logro de los objetivos organizacionales.
Fomenta el aprendizaje y el desarrollo profesional
Cuando la retroalimentación se realiza de manera constante, permite a los trabajadores aprender más y superar desafíos. Además, la empresa puede identificar áreas de mejora para impulsar programas internos de desarrollo profesional.
Establece un proceso de mejora continua
Si tus equipos de trabajo saben qué hacer, qué mejorar o cómo corregir el rumbo, se genera un círculo virtuoso de mejora constante, aumentando la calidad, agilidad y eficacia de las actividades de cada área y colaborador.
Promueve una mejor comunicación
El feedback empleado es comunicación, es decir, tener un canal abierto y sincero entre los colaboradores, lo que mejora la calidad de las relaciones.
Aumenta la retención de talento
La retroalimentación elimina barreras entre colaboradores, reduciendo la incertidumbre. Se refuerza el sentido de pertenencia de los colaboradores hacia la empresa y, al estar en un proceso de mejora continua, es más probable que el talento decida permanecer en ella.
5 ejemplos de feedback empleado positivoen el trabajo
Dar un simple “buen trabajo” a tus colaboradores puede parecer sencillo, pero encontrar las palabras adecuadas y el momento oportuno para brindar un feedback empleado que los motive a seguir por el buen camino o a mejorar su desempeño requiere cierta destreza.
A veces, un feedback empleado positivo genérico, sin objetivos ni fundamentos, termina siendo una mera adulación que no aporta valor a la empresa. Aquí te presentamos 5 ejemplos de cómo dar un feedback empleado positivo efectivo:
1. Céntrate en un objetivo específico
Las conversaciones para reconocer el trabajo o la actitud de un colaborador no tienen que extenderse por horas. Evita charlas prolongadas y ve directo al grano. Define claramente qué quieres destacar de esa persona: ¿sobresalió en un proyecto en particular? ¿mantiene un alto rendimiento desde hace meses?
Tómate unos minutos para concretar el objetivo y luego habla con el empleado de manera directa, cordial y clara.
Supongamos que en tu equipo hay alguien que en la última evaluación mensual destacó por lograr el mayor número de llamadas de servicio exitosas.
“Carolina, acabo de revisar los resultados mensuales de nuestro departamento de servicio y quiero felicitarte por lograr un hito trascendental para todo el equipo y la compañía. Te has convertido en un modelo a seguir para todos nosotros. Continúa con ese magnífico desempeño y ten presente que no existen límites para brillar en lo que haces.”
2. Resalta sus cualidades
Todo trabajador necesita motivación. Aunque no cuentes con indicadores de desempeño, puedes fijarte en rasgos de las personas que consideres como una actitud positiva. No dudes en darles una palmadita en la espalda y expresarles tu opinión.
Por ejemplo, si observas que un colaborador siempre llega con una sonrisa a la oficina, saluda y contagia a los demás con su actitud, podrías decirle:
Daniel, tu actitud es extraordinaria. Cada vez que llegas a la oficina, traes contigo una energía que inspira y motiva a todos a tu alrededor. Quiero felicitarte sinceramente por ello.
3. Comenta su desempeño
Medir el desempeño de tu equipo es crucial. No siempre tienen que haber récords para dar un feedback empleado. Puedes conversar con cada integrante de tu área para destacar aspectos de su desempeño general y establecer tus expectativas a corto, mediano y largo plazo. Veamos un ejemplo:
Isabel, ¿cómo te encuentras? ¿Cómo te sientes? Falta una semana para el inicio de la temporada alta. Admiro tu impresionante capacidad de adaptación y el notable crecimiento que has tenido en la empresa. Tu organización está siendo clave para que el equipo cumpla con los plazos de entrega. Confío en que mantendrás esa atención al detalle y que brindarás apoyo a las dos nuevas compañeras que se han incorporado.
4. Expresa un elogio y un área de mejora
Un feedback empleado constructivo no solo reconoce y motiva, sino que también ofrece un consejo o recomendación. La fórmula «reconocimiento + mejora» es una excelente técnica para dar una retroalimentación asertiva. Aquí tienes un ejemplo:
Fernando, estamos encantados con tu desempeño. Tus informes y análisis de incidencias contribuyen significativamente al ahorro de costos en la empresa. Muchas gracias por tu dedicación. Como sugerencia, te recomiendo tener más contacto con los operadores, ya que su experiencia podría brindarte información muy útil. ¿Qué opinas de establecer un canal de comunicación con ellos? Considéralo y, si te parece adecuado, la compañía te respaldará.
5. Evita las exageraciones
Tu feedback empleado debe ser honesto, mesurado y claro. Las exageraciones no le sirven a nadie, porque en lugar de motivar pueden provocar el efecto contrario: que no te crean o que el colaborador sienta que ya no necesita esforzarse en su trabajo. Seguramente te ha pasado que alguien te llena de halagos y eso te hace desconfiar. Es como cuando ves un anuncio de esos productos milagro: «increíble, único, lo mejor que cambiará tu vida». No te crees esas palabras, ¿verdad?
Es mejor ser concreto y moderado en tus elogios o reconocimientos:
Valentina, quiero destacar algunos puntos sobre tu liderazgo. Primero, tu trabajo es puntual y sin errores, y ofreces una excelente atención al cliente. Además, te preocupas por tus colegas, compartes tus experiencias y los apoyas, creando un gran ambiente laboral y ayudándoles a reducir su curva de aprendizaje. Gracias por todo lo que aportas al equipo y la empresa. Sigue con este gran desempeño, por favor.
5 ejemplos de feedback empleado negativo en el trabajo
La parte más desafiante de la retroalimentación surge cuando tienes que abordar aspectos que no están funcionando bien. No todo se trata de reconocimiento; también implica corregir y señalar situaciones que no están beneficiando al equipo o a la empresa.
Utiliza estas técnicas para brindar un feedback empleado negativo que realmente ayude a las personas a comprender y querer mejorar.
1. Muestra empatía
Recuerda que el trato humano siempre debe prevalecer. Si has notado algo que no te agrada, una disminución en el desempeño o algún aspecto por corregir, antes de conversar con ese colaborador, analiza el contexto y considera si hay algún cambio o factor que esté contribuyendo a esa situación.
Ser empático significa ponerse en el lugar del otro, así que primero permite que te comparta qué piensa o siente; al escucharlo, podrás determinar si tu feedback empleado negativo está relacionado con lo que te está contando.
Aquí tienes un ejemplo de cómo abordar tu retroalimentación de manera empática:
«Hola, Javier. Tengo un asunto que discutir contigo, pero primero cuéntame: ¿cómo te encuentras? ¿Qué tal la relación con tus compañeros? ¿Cómo te has adaptado al nuevo Centro de Distribución? Somos conscientes de que el cambio ha supuesto un desafío, pero tu talento es realmente valioso para nosotros en ese lugar. He observado que no has estado alcanzando los objetivos de entrega con la misma eficacia que antes. Mi intención es averiguar cómo podemos brindarte apoyo para que retomes tu anterior nivel de rendimiento»
2. Sé honesto
Ser transparente es una técnica sencilla para hacer un feedback empleado negativo. Evita dar rodeos y ve directo al punto para que el colaborador comprenda lo que necesitas de su parte. Cuida tus palabras, ya que ser honesto no implica ser cruel o prepotente.
Imagina que en tu equipo hay un colaborador que muestra una actitud poco favorable, se queja con frecuencia y le cuesta integrarse al trabajo en grupo. A pesar de contar con las habilidades necesarias para desempeñar su función, su comportamiento sugiere que requiere guía y dirección para encauzar su potencial de manera positiva.
«Laura, ¿podríamos conversar unos instantes? He percibido que te está costando incorporarte plenamente al grupo de trabajo. ¿Consideras acertada mi observación? Estoy convencido de tus extraordinarias capacidades y del valor que aportas a nuestro equipo. Sin embargo, he notado que en ocasiones adoptas una postura un tanto distante o incluso desafiante. Quisiera pedirte, con el mayor respeto, que realices un esfuerzo consciente por estrechar lazos con tus compañeros y mostrarte más receptiva y colaborativa. Estoy seguro de que, al hacerlo, no solo mejorarás tu propia experiencia laboral, sino que también contribuirás a fortalecer la dinámica y el espíritu de cooperación en nuestro equipo».
3. Utiliza la técnica del sándwich
En ocasiones, con ciertas personas, ir directo al grano puede herir susceptibilidades o podría dar la impresión de que estás totalmente inconforme, cuando hay elementos que sí valoras. Por lo tanto, un método para brindar un feedback empleado negativo es la técnica del sándwich. Esta consiste en emitir primero un reconocimiento sobre el trabajo, desempeño o actitud del colaborador, luego abordar el punto negativo (lo que quieres que no suceda o debe corregir la persona) y terminar con un llamado a la acción o una recomendación.
Esta técnica es realmente funcional porque no solo haces una crítica, sino que también propones una mejora, lo cual es totalmente constructivo. Aquí tienes un ejemplo:
«Hola, Pablo. Agradezco que me dediques unos minutos para discutir un asunto relevante. Valoro la forma en que has estado desarrollando los diseños para la compañía, aprecio tu organización con los archivos, lo cual permite que realices las entregas antes de las fechas establecidas. Sin embargo, me inquieta un poco que te hayas alejado ligeramente de las directrices de nuestra marca. Hemos recibido algunas observaciones por parte de la dirección, señalando que la calidad y el nivel de los diseños han disminuido en comparación con lo que esperan de nuestro equipo. Mi sugerencia es que dediques el tiempo necesario para revisar minuciosamente cada diseño una vez que lo hayas finalizado, prestando especial atención a los detalles. Prefiero que entregues tu trabajo justo en la fecha límite, asegurando así un resultado más pulido y evitando la precipitación. Además, ¿qué opinas si, un día antes de cada entrega, nos reunimos para revisar juntos aquellos diseños relacionados con la identidad de marca? Creo que sería una excelente oportunidad para asegurarnos de que estamos alineados con las expectativas de la empresa»
4. Separa lo personal de lo profesional
Si te basas en indicadores de desempeño, trata de dividir lo personal de lo profesional para hacer un feedback empleado negativo constructivo. Es posible que te encuentres con un integrante de tu equipo cuyo rendimiento está por debajo de lo esperado.
Si su personalidad o forma de ser te genera cierta incomodidad al momento de brindarle retroalimentación, es importante que logres distinguir entre el aspecto personal y el profesional. Considera el caso de alguien que, a pesar de tener una actitud colaborativa y una naturaleza empática, no logra alcanzar los niveles de productividad deseados.
«Buenos días, Leticia. Como parte de mi compromiso de mantener una comunicación abierta, estoy realizando reuniones individuales con cada miembro del equipo. Antes de comenzar, quiero enfatizar que mis observaciones se basan únicamente en los informes de rendimiento. Durante el último bimestre, he notado un descenso significativo en tus niveles de productividad, y me gustaría comprender mejor a qué factores atribuyes esta situación. Además, quisiera saber qué acciones podemos emprender como equipo para ayudarte a cumplir con las metas que nos hemos propuesto»
5. Utiliza el storytelling
Según el tema que quieras abordar en la retroalimentación, podría ser útil crear una historia que ejemplifique lo que quieres lograr o en la que aclares cuál es el papel deseado de ese colaborador dentro del equipo y la empresa. Veamos un ejemplo:
«Ana, imagina por un momento el futuro que deseamos para nuestro departamento. ¿Cuál crees que debería ser nuestro enfoque principal como equipo? He reflexionado al respecto y he compartido mi visión con todos ustedes. Aspiro a que nos convirtamos en el grupo de trabajo más eficiente y confiable de la organización, donde cada miembro sea un profesional responsable que no solo cumpla con sus tareas asignadas, sino que también busque constantemente formas de optimizar nuestros procesos. ¿Qué se necesita para hacer esto posible? Compromiso y una mentalidad de mejora continua. Mi deseo es que todos estemos actualizados en las últimas tendencias y propongamos soluciones innovadoras para nuestro departamento y la compañía en su conjunto. Me encantaría conocer tu perspectiva sobre este tema»
Con estos consejos podrás hacer un feedback empleado negativo estratégico y humano que ayude a los demás a mantener su desempeño, incrementar sus resultados o corregir actitudes y desarrollar habilidades necesarias para su labor.
Un feedback empleado negativo adecuado te beneficia a ti, a quien lo recibe y a la empresa. Está comprobado que las organizaciones que propician un ambiente colaborativo, empático y con una comunicación eficiente logran sus objetivos, crecen y destacan frente a otras compañías en su sector.
Seguimiento y evaluación: la clave para un feedback empleado efectivo
Brindar retroalimentación a tus colaboradores es un paso fundamental para su crecimiento y desarrollo profesional. Sin embargo, el proceso no termina ahí. Para garantizar que el feedback empleado tenga un impacto real y duradero, es esencial realizar un seguimiento adecuado y evaluar regularmente el progreso. A continuación, exploraremos por qué el seguimiento y la evaluación son cruciales y cómo implementarlos de manera efectiva.
La importancia del seguimiento después del feedback
Ofrecer retroalimentación sin un plan de seguimiento es como dar un consejo y luego desaparecer. Para que el feedback empleado sea verdaderamente efectivo, es necesario asegurarse de que se estén tomando medidas concretas para abordar las áreas de mejora identificadas. Aquí es donde entra en juego el seguimiento.
El seguimiento te permite:
- Asegurar que el empleado comprenda y aplique el feedback: A veces, los colaboradores pueden asentir y estar de acuerdo con la retroalimentación en el momento, pero luego tienen dificultades para traducirla en acciones. Al realizar un seguimiento, puedes verificar que hayan comprendido el feedback y ofrecerles orientación adicional si es necesario.
- Identificar obstáculos y desafíos: Durante el proceso de seguimiento, puedes descubrir que el empleado enfrenta obstáculos o desafíos que le impiden aplicar el feedback de manera efectiva. Esto te brinda la oportunidad de trabajar en colaboración para encontrar soluciones y brindar el apoyo necesario.
- Mantener el impulso y la motivación: El seguimiento regular demuestra tu compromiso con el desarrollo del empleado y ayuda a mantener el tema en primer plano. Esto puede ser especialmente importante cuando se trata de cambios de comportamiento o habilidades que requieren tiempo y esfuerzo para desarrollarse.
Cómo realizar un seguimiento efectivo
Para realizar un seguimiento efectivo después de una sesión de retroalimentación, considera estos pasos:
- Establece metas y objetivos claros: Trabaja con el empleado para establecer metas y objetivos específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un plazo determinado (SMART, por sus siglas en inglés). Esto proporcionará una hoja de ruta clara para el progreso y facilitará la evaluación posterior.
- Define acciones concretas: Identifica las acciones específicas que el empleado debe tomar para alcanzar las metas establecidas. Esto podría incluir capacitación adicional, práctica deliberada, cambios en los procesos de trabajo o la búsqueda de mentores.
- Establece un calendario de seguimiento: Acuerda un calendario regular para reunirse con el empleado y revisar su progreso. La frecuencia dependerá de la naturaleza de las metas y la complejidad de las acciones requeridas. Asegúrate de priorizar estas reuniones y tratarlas con la misma importancia que cualquier otra reunión laboral.
- Ofrece apoyo y recursos: Durante las reuniones de seguimiento, brinda al empleado el apoyo y los recursos necesarios para tener éxito. Esto podría incluir capacitación adicional, acceso a mentores o tiempo asignado para practicar nuevas habilidades.
Evaluación del progreso y ajuste de estrategias
A medida que realizas el seguimiento, es importante evaluar regularmente el progreso del empleado y ajustar las estrategias según sea necesario. Aquí te explicamos cómo hacerlo:
- Revisa las metas y los objetivos: En cada reunión de seguimiento, revisa las metas y los objetivos establecidos inicialmente. Evalúa qué se ha logrado, qué obstáculos se han encontrado y qué aún queda por hacer.
- Celebra los éxitos: Reconoce y celebra los logros y avances del empleado, por pequeños que sean. Esto ayuda a mantener la motivación y refuerza los comportamientos positivos.
- Identifica áreas de mejora: Si el progreso es más lento de lo esperado o si surgen nuevos desafíos, trabaja con el empleado para identificar las áreas que requieren atención adicional. Esto podría implicar ajustar las metas, modificar las acciones o proporcionar recursos adicionales.
- Brinda retroalimentación continua: La evaluación no tiene que limitarse a las reuniones de seguimiento formales. Ofrece retroalimentación continua al empleado a medida que observas su progreso en el trabajo diario. Esto ayuda a reforzar los comportamientos positivos y a abordar cualquier problema de manera oportuna.
- Ajusta las estrategias según sea necesario: Si las estrategias iniciales no están produciendo los resultados deseados, no tengas miedo de probar enfoques diferentes. La flexibilidad y la adaptabilidad son clave para un proceso de desarrollo efectivo.
Beneficios a largo plazo del seguimiento y la evaluación
Invertir tiempo y esfuerzo en el seguimiento y la evaluación después del feedback empleado ofrece beneficios significativos a largo plazo, tanto para el individuo como para la organización en su conjunto:
- Mejora del desempeño: Al brindar apoyo continuo y ajustar las estrategias según sea necesario, puedes ayudar a los empleados a mejorar su desempeño de manera más efectiva y sostenible.
- Mayor compromiso y retención de empleados: Cuando los empleados ven que su desarrollo es una prioridad y que reciben apoyo continuo, es más probable que se sientan valorados y comprometidos con su trabajo y con la organización.
- Cultura de aprendizaje y crecimiento: Al institucionalizar el seguimiento y la evaluación como parte del proceso de feedback, fomentas una cultura de aprendizaje y crecimiento continuos en toda la organización.
- Logro de objetivos empresariales: A medida que los empleados mejoran sus habilidades y desempeño, están mejor equipados para contribuir al logro de los objetivos y metas generales de la empresa.
El seguimiento y la evaluación son componentes esenciales de un proceso de feedback empleado exitoso. Al invertir tiempo y esfuerzo en estas actividades, puedes garantizar que tu retroalimentación tenga un impacto duradero y significativo en el crecimiento y desarrollo de tus colaboradores, y en última instancia, en el éxito de tu organización.
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