¿Puede existir una empresa sin activos? En realidad, no. Hoy en día, todo tipo de empresas poseen diversos activos y simplemente no pueden funcionar correctamente sin tener algunos. Un activo se determina tradicionalmente como un elemento valioso, controlado o propiedad de una entidad, persona o gobierno, y se espera que proporcione un beneficio evaluable en el futuro. Sin embargo, también puede ser algo que no tiene una plasmación física, por ejemplo, un recurso o una estrategia. Por eso todos los activos se subdividen en dos grandes categorías: tangibles e intangibles.
¿Qué es un activo?
Un activo es un recurso con valor que alguien posee con la intención de que genere un beneficio futuro (sea económico o no). En contabilidad, representa todos los bienes y derechos de una empresa, adquiridos en el pasado y con los que esperan obtener beneficios futuros.
Activos tangibles
Los activos tangibles son los activos en el balance general de una empresa que tienen forma física. Esto incluye maquinaria, equipo de oficina y propiedades, así como materiales que se utilizan en la producción.
Como ya hemos mencionado anteriormente, los activos tangibles son piezas físicas de propiedad que influyen en el valor de su empresa. Estos pueden ser:
- Terrenos;
- Edificios corporativos;
- Maquinaria, inventario y equipo;
- Efectivo y sus equivalentes;
- Títulos en bolsas públicas de valores/bonos.
Los activos tangibles se suelen amortizar. La depreciación es un término acuñado para determinar el proceso en el que se asigna el coste de un activo tangible a lo largo de su vida útil. Los activos tienden a perder su valor en un periodo de tiempo bastante corto, normalmente un año. En función de su convertibilidad, los activos tangibles se subdividen en dos categorías:
Materiales corrientes
Los activos tangibles corrientes son elementos líquidos o a corto plazo que se convierten en equivalentes de efectivo sin problemas (moneda, inventario, cuentas por cobrar, etc.). El proceso de conversión suele durar menos de un año, lo que permite obtener fondos en caso necesario.
Fijos materiales
Los activos fijos o a largo plazo, por el contrario, no son tan fáciles de convertir en dinero; el proceso de conversión dura más de un año. Los ejemplos más notables de activos a largo plazo son los edificios corporativos, las oficinas, los terrenos y los equipos específicos. Los activos fijos permiten a las empresas funcionar sin demoras.
Activos intangibles
Las empresas se enfrentan a un importante desafío: la valoración y gestión de sus activos intangibles. Y es que, los activos tangibles son, a priori, fáciles de valorar ya que suelen ser activos físicos con valores monetarios medibles. Sin embargo, los intangibles, que con el paso de los años han pasado a representar la mayor parte del valor de las grandes empresas, no cuentan con esa característica de ser perfectamente valorizables. Pero ¿qué son los activos intangibles? Vamos a verlo con ejemplos.
¿Qué son los activos intangibles de una empresa?
Tal y como define la Real Academia Española,un activo intangible es aquel “activo que está compuesto por derechos como patentes y marcas, que no se concretan en bienes materiales pero tienen un valor liquidativo”.
A medida que la tecnología se va extendiendo, el valor de las organizaciones depende cada vez más de los progresos que realizan sus empleados endesarrollos tecnológicos, de sus relaciones corporativas, del uso de sus datos y de su marca. Los intangibles son activos que existen y que tienen su valor, pero al no ser activos físicos ni existir la capacidad de convertirlos fácilmente en un ingreso, calcular su valor real se convierte en un desafío.
Ejemplos de activos intangibles
Cuando hablamos de activos intangibles, Aon y Ponemon Institute recuerda que hablamos principalmente de ocho categorías:
- Propiedad Intelectual: Los activos creados por el intelecto humano, tales como patentes, derechos de autor, marcas, conocimiento de un negocio, etc.
- Derechos contractuales: Derechos de valor generado entre empresas, tales como los royalties y los acuerdos por licencias.
- Marca: El valor asociado a la percepción del consumidor, tal el valor de la marca.
- Intangibles duros (hard intangibles): Activos que tienden a figurar en los balances como un elemento específico, como el fondo de comercio o las licencias de software. Se trata de un intangible marcado por vía legal, contractual o de otro tipo de protección (local o en todo el mundo)
- Datos: La información almacenada en los sistemas informáticos, como la lista de clientes.
- Derechos no económicos: Activos que no suelen afectar a la generación de ingresos, como los acuerdos de no competencia.
- Relaciones: Valor asociado a las redes de personas/corporaciones de una compañía.
- Derechos o contratos públicos: Derechos de valor de carácter público o a través del Gobierno, como el permiso de planificación o los derechos de perforación.
Entonces… Activos tangibles e intangibles: ¿qué diferencia hay?
Un activo puede ser tangible o intangible. Los activos tangibles se utilizan como ayuda en las operaciones diarias de una empresa y pueden convertirse en efectivo si es necesario.En cambio, los activos intangibles, son inmateriales, aunque tienen valor para la empresa. Incluyen el nombre de la marca y la propiedad intelectual. Los activos intangibles no pueden convertirse en efectivo, pero sí contribuyen a las ventas y a los ingresos.
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